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Hotel & Spa VilaVella ****
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La montaña suele ser uno de los destinos más elegidos entre los huéspedes de Vilavella Hotel & Spa. La ubicación de nuestro alojamiento, estratégicamente situado entre Portugal, Zamora y Ourense, lo convierte en una elección ideal para los viajeros que buscan desconectar en plena naturaleza.
Aunque puede parecer lo contrario, los planes que ofrece la montaña son muy variados y aptos para todo tipo de personas, desde las más aventureras hasta las más sosegadas. Las montañas de Manzaneda y el Parque Natural O Invernadeiro, situados muy cerca del hotel, son opciones ideales para descubrir la variedad de fauna y flora de nuestro territorio. Si estás pensando en visitarnos próximamente, no dudes en hacer una escapada a las montañas, ¡te sorprenderán!
¿Qué ver en Manzaneda?
En este paraje encontramos la única estación de esquí de Galicia, Cabeza de Manzaneda, un lugar ideal para disfrutar de la nieve. Si no te gusta esquiar, o la meteorología no lo permite, la estación también cuenta con un parque de aventuras apto para toda la familia en cualquier época del año. Desde una tirolina gigante hasta tiro con arco, pasando por un parque multiaventura compuesto por 16 retos diferentes.
Lo que muchas personas desconocen es que la mayor parte de la superficie de Manzaneda está integrada en la Red Natura 2000, debido a su gran riqueza botánica: encinas y castaños centenarios que convierten sus bosques en un auténtico lugar de ensueño. Su entorno natural, junto con su patrimonio histórico y etnográfico hacen de Manzaneda un maravilloso rincón para pasear y desconectar en todas las estaciones del año.
Alejándonos un poco de la cumbre podemos encontrar el pueblo de Manzaneda, una joya perdida entre montañas que aún conserva algunos vestigios medievales. La muralla de la villa, de las que se conservan 100 de sus 400 metros, data del siglo XII. El ayuntamiento ha diseñado un pequeño circuito interactivo en el casco histórico del pueblo, con códigos QR que permiten a los visitantes ampliar la información.
A tan solo dos kilómetros del pueblo encontraremos uno de los bosques con más árboles monumentales de Galicia, el Souto de Rozavales. La mayor parte de sus castaños tienen más de quinientos años de antigüedad, pero hay uno que llama especialmente la atención: el castaño de Pumbariños. Con 13 metros de diámetro en su tronco, se necesita a diez personas para rodearlo completamente.
Declarado Parque Natural en el año 1997, O Invernadeiro tiene mucho que ofrecer a sus visitantes: rutas, bosques, ríos y fauna muy variada. Para poder visitarlo es necesario solicitar con antelación un permiso de acceso, ya que las visitas están restringidas a un cierto número de personas por día. Esta limitación hace que la experiencia sea aún mejor, pues será casi imposible que te encuentres con otros senderistas durante tu travesía.
Dentro de los límites de O Invernadeiro no existen asentamientos humanos, convirtiéndolo en un espacio perfecto para la desconexión. Las rutas que discurren por este espacio natural son muy variadas, tanto en dificultad como en tamaño, haciendo posible que cualquier persona pueda disfrutar del sendero sin apuros. Las Ruta del Agua y La Ruta de las Truchas son las más conocidas, de dificultad baja y recorrido circular, ya que permiten caminar bordeando el río.
¡Nos vemos pronto!