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Hotel & Spa VilaVella ****
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Se acabó la Semana Santa, pero si ya estás pensando en otra escapada para el puente de mayo en Vilavella Hotel & Spa siempre te damos ideas. En estos días festivos la Ribeira Sacra fue de los destinos favoritos para las personas turistas y su ocupación alcanzó el 88%, cifra sólo superada por la Mariña lucense.
Este bello territorio bañado por viñedos, situado entre el sur de la provincia de Lugo y el norte de la de Ourense, es el gran “tirón” entre los destinos vacacionales de Galicia, sobre todo durante la primavera y el otoño. Por lo tanto, si quieres visitar la Ribeira Sacra, puedes hacer tu reserva en nuestro hotel y desplazarte cómodamente a conocer todos sus rincones y disfrutar de su oferta gastronómica, con el vino como gran referente.
Si bien se hablaba de ella como “el gran secreto de la Galicia interior”, ahora quizás ya no lo es tanto debido a la gran afluencia de turistas, pero siempre contarás con rincones para encontrar la paz y quedarte embelesado con el paisaje bañado por los ríos Miño y Sil.
El origen de su nombre es fruto de debate, porque para algunos historiadores Ribeira viene de su condición de zona entre ríos, de ribera, y Sacra por sus monasterios, pero para otros el origen de su nombre sería por sus robledas y Ribeira provendría del término Rovoyra.
De lo que no hay debate es que el paisaje más representativo e imponente es el Cañón del Sil. Entre las provincias de Lugo y Ourense, a poco más de doscientos metros de altura, se encuentra el tramo final del río y a sus laterales, y a lo largo de más de treinta y cinco kilómetros se levantan dos paredes que en algunas zonas se elevan hasta casi quinientos metros en vertical sobre sus aguas. Estas laderas guían al río a través de amplias curvas y meandros, que forman algunos de los rincones más mágicos de toda Galicia.
A lo largo del Cañón del río Sil a su paso por la Ribeira Sacra existe una amplia red de miradores en ambas orillas, que son el gran reclamo para los amantes de los selfies. Muchos de ellos se sitúan en las zonas más elevadas del Cañón, permitiéndonos observar tanto el encajado recorrido del Sil, como las tierras que se extienden a su alrededor. Podremos ver también monasterios escondidos, grandes extensiones de viñedos e impresionantes cascadas.
Además de los paisajes fluviales, los monasterios también son una referencia y en esta ruta hay 18, que si bien te será casi imposible visitarlos todos en tu primera visita, te recomendamos especialmente el de Santa Cristina de Ribas de Sil, Santa María de Ferreira de Pantón, y el misterioso cenobio de San Pedro de las Rocas.
Y no nos podemos olvidar del vino, cuyo cultivo se dice que fue implantado por los romanos y recuperado por los monjes en la Edad Media. Los vinos elaborados en Ribeira Sacra cuentan con Denominación de Origen desde 1996 y actualmente son reconocidos a nivel mundial tanto por su calidad como por la dificultad que entraña su cultivo, siendo un exponente de la viticultura heroica.
Para acompañar tan sabrosos caldos, te recomendamos que pruebes la gastronomía típica. Como buena tierra de interior, la especialidad de Ribeira Sacra es una carne de gran calidad, en la que destacan la de ternera, cerdo, caza y ricos embutidos. Entre los postres, no te pierdas la Bica de Castro Caldelas y todo tipo de sobremesas con castañas y miel.
Por lo tanto, si estás planificando una nueva escapada, la Ribeira Sacra es una opción con múltiples posibilidades.
